Tras el comienzo hace unas pocas semanas de la temporada para los equipos de Segunda División B y Tercera, el pasado fin de semana arrancó la temporada para el grueso de los equipos que componen la sección de fútbol sala y que participan en las competiciones de juegos deportivos de Navarra.

Estos equipos comprenden desde la categoría Juvenil hasta la Alevín, pasando por cadetes e infantiles. La única excepción la protagonizó el Infantil A, que descansaba la primera jornada al contar en su grupo con un número impar de equipos.

Nuestros equipos corrieron suertes dispares en su primera jornada de liga. El día comenzó de dulce en nuestras instalaciones, en las que disfrutamos de las victorias del equipo Infantil A por 8-2 frente al colegio de El Huerto y del Cadete A por 4-1 frente al Ribera de Navarra, mientras que el  Alevín  ganó a domicilio en la pista del Xota por 3 goles a 4.

La otra cara de la moneda la protagonizaron el Juvenil B que perdió frente al Redín en nuestras instalaciones por 3 goles a 4 y el Cadete B que cayó en su visita a Irurzun por 4-2 frente al Xota. La jornada acabó con otro color en la misma pista, gracias a una contundente victoria del Juvenil A frente al Xota por 0 goles a 3.

Esta semana hablaremos del partido jugado por el Cadete A, que le enfrentaba en su primera jornada al que, a priori, va a ser su rival directo para liderar el grupo. Si bien el equipo Cadete A había generado grandes expectativas en su primera temporada en la categoría (en la que llegaron finalizar cuartos la fase de campeones), éste partido era una incógnita ya que se enfrentaban sin ritmo de competición dos equipos potentes que el año pasado no pudieron pasar del empate en las dos veces que se enfrentaron.

El partido comenzó cómodo para el San Juan que más entero físicamente, pronto se hizo con el control del balón y el ritmo de juego, aunque no terminaba de llegar con claridad a la portería del Ribera de Navarra. Fue transcurridos 5 minutos de partido cuando Carlos consiguió abrir el marcador. El partido siguió por los mismos derroteros los minutos siguientes pero el equipo cadete no consiguió ampliar su ventaja, y como suele suceder en estos casos, el Ribera de Navarra se aprovechó de una muy buena acción individual para empatar el partido en uno de los pocos errores cometidos por la defensa del San Juan.

Era una de las pocas veces que el Ribera había inquietado la portería de Ander, pero este gol cambió el signo del partido, dando paso a unos minutos en los que el equipo ribero pudo desarrollar su mejor juego. Faltaba poco para llegar al descanso y fueron minutos vistosos para los espectadores, pero inquietantes para el equipo ya que podía marcar cualquiera. En ese momento el entrenador local pidió un tiempo muerto y, tras reordenar al equipo, éste volvió a la pista para encerrar en su pista a los de Tudela y así volver a ponerse por delante al filo del descanso.

Con este 2-1 se reanudó la segunda mitad en el que el San Juan había aprendido la lección del primer tiempo y no dio opción al Ribera de Navarra para reengancharse al partido. Con un Sergio Tuñón en estado de gracia y que cuajó una gran segunda mitad, nuestro equipo cadete fue alejándose en el marcador hasta llegar al 4-1 que resultó definitivo. A partir de ahí el equipo local se limitó a controlar el balón y los tiempos del partido, mientras que el portero Martín desbarató los escasos intentos de los de Tudela de acercarse en el marcador.

En definitiva fue un partido muy completo de nuestros jugadores que supieron imponerse ante un rival directo y en el que se vio premiado el esfuerzo realizado en una pretemporada exigente. En cualquier caso no debe haber lugar a la relajación, pues este Ribera de Navarra demostró ser muy peligroso en algunas fases del partido y tiene mucho margen de mejora estas semanas, en cuanto adquiera ritmo de competición.