San Juan y Ribera Navarra ofrecieron un partido vibrante en la Agrupación, que se saldó con derrota por la mínima para los nuestros. Ambos equipos dejaron su sello sobre el parqué.

La primera parte fue frenética, con mucho ritmo y con dos equipos queriendo imponer su estilo de juego. Ambos con defensas altas, presionando… En cuanto a ocasiones las más peligrosas fueron para los verdes, pero Domené estaba seguro bajo palos. Adrián también lo estuvo cuando le tocó intervenir. El 1-0 llegó en el minuto ocho por medio de un balón a Mario tras un rechazo y que éste cedía al segundo palo donde lucas marcaría a placer. Poco le duró la alegría a los de Iker Bizkai, ya que en el nueve de juego Raid ponía las tablas con una falta directa al borde del área (1-1). A partir de ahí el partido se abría más pero no hubo más goles hasta el descanso pese al gran juego mostrado por los dos equipos.

La segunda mitad empezó con un San Juan que mandaba en el juego, aunque este era más pausado y las ocasiones no eran muy claras. En una de ellas, Beñat era derribado cuando se plantaba solo ante el meta y la falta no fue decretada. El Ribera Navarra también iba a tener la suya a los pies de Mario, que tras una salida desde su meta, Torero despejaba con apuros. En la siguiente acción los locales apretaban la salida visitante y Mario robaba en media pista, para acabar jugando con Txema y éste disparó por dos veces. Román cogió el rechazo y puso el balón en el fondo de la red (2-1). Un minuto después otra vez robaba Román y batía a Mario colocando el 3-1.

Con la cómoda ventaja los de la Agrupación se gustaban y eran superiores, hasta que esta dinámica se rompió tras la expulsión de Simón. La defensa en inferioridad fue impecable. Cuando no era un defensor quien taponaba, ahí estaba Torero. Pasados los dos minutos y quedando seis para el final, en la siguiente jugada recuperando el cuarto de pista, Chema se llevaba el balón con garra, creando una superioridad y Raid en el segundo palo recortaba distancias (3-2). Al minuto un tiro lejano de Camargo sin apenas peligro, el balón tocaba en Mario y lo desviaba lo suficiente para coger al portero local a contrapié (3-3).

La gran remontada ribera llegó en una estrategia mal ejecutada, donde los naranjas salieron como balas e Hidalgo marcaba en el mano a mano (3-4). Aun así el empate pudo llegar tras dos acciones de Beñat, pero no fue tal. El tiempo se agotaba e Iker Bizkai apostaba por el portero jugador. No hubo gran peligro y para colmo llegaba el 3-5 de los tudelanos, tras un robo donde los locales pidieron falta pero que el colegiado se desentendió de la jugada con los verdes ya parados, la jugada siguió y marcaron en el dos contra Torero.

Dura derrota con un desenlace final que empañó el gran partido de San Juan. Por su parte el Ribera Navarra nunca dejó de pelear y logró una meritoria remontada a domicilio.