GALERÍA DE FOTOS | Esta semana nos damos una vuelta por los entrenamientos de balonmano, en los que un equipo infantil femenino y otro mixto de iniciación, mantienen sus actividad deportiva dentro de la normativa Covid.
Hablamos con el director de la actividad, Ricardo Azanza, quien nos cuenta las principales medidas y características de esta ‘nueva normalidad’ en la práctica del balonmano: «Nos preocupamos por el hecho de querer hacer las cosas bien, de querer llevar todas las normas al pie de la letra como son los geles, las distancias, evitar el contacto… Hay que decir que las chicas y los pequeños están muy concienciados, respetan las normas y lo están haciendo muy bien».
Preguntado por las principales medidas, la actividad se rige por lo marcado desde el Gobierno de Navarra: «Tenemos el protocolo que nos marcan desde el Instituto Navarro del Deporte, que nos indica el entrenar con mascarilla, grupos reducidos de 6 personas que no inter actúen entre ellos y a la hora de entrar en pista limpiarse las manos con el gel, además de tomarles la temperatura. Lo fundamental es que no haya contacto, grupos reducidos y mucha, mucha higiene».
En cambio, entrenar y no poder competir siempre es raro en el deporte… Así lo reconoce Ricardo, aunque le busca el lado positivo: «Si que igual empezamos a echar un poco en falta la competición, pero en estas edades tampoco es importante porque al final podemos entrenar mucha técnica individual, que en esta serie de edades es fundamental. Ciclo de pasos, armar bien el brazo, pases, en defensa horientaciones… No necesitamos tampoco mucho más en estas edades».
También se refiere a la necesidad de hacer grupo aún con el distanciamiento social: «Han venido con muchas ganas, más si cabe porque creo que en el día a día están muy limitados en muchos aspectos y aquí, dentro de todo este tipo de limitaciones que tenemos, es bastante normal la situación para ellas. Siguen teniendo contacto con el equipo, siguen haciendo el deporte que les gusta y en el fondo creo que están mucho mejor de los que nos puede parecer a todos desde fuera».
Por último, Ricardo nos cuenta cómo está organizada la actividad de balonmano en esta nueva temporada 20/21, después de dos años compitiendo en San Juan: «Este año, por la edad de los chicos y chicas que comenzaron hace tres años, han pasado a una categoría en la que ya no pueden jugar mixto, por lo que dado a que el número de chicas era mayor al de chicos, nos hemos decantado por el balonmano femenino. En ese sentido hemos sacado un infantil de primer año con 12 chicas y luego ya por debajo seguimos teniendo el grupo de iniciación, en el que ahí siguen siendo mixtos. Tenemos ocho críos que poco a poco van haciendo grupo. Nos gustaría que hubiera alguna niña más pero estamos contentos con la continuidad».