Tal y como era predecible, la segunda edición del Trail de Arantza resultó ser además de una entretenida jornada, también una dura prueba. Nuestro corredores experimentaron lo que es correr en una auténtica carrera de montaña, tanto por su dureza, como por su belleza.
Esta carrera vuelve a recordar cómo y cuándo se tiene que dosificar y reservar las fuerzas de un deportista, ya que además del desnivel acumulado, también hay que hacer frente la temperatura.
La siguiente cita será en la Extreme Higa de Montreal que se disputará el 7 de mayo.