El equipo de Pamplona volverá a participar en Copa por segunda vez en cuatro años en 2ªB. El bagaje se antoja satisfactorio para un equipo que ha sufrido lesiones en casi todas las líneas. Antes de la final ante Sala Quinto, Guillermo Bueno, pichichi del equipo, se caía de la convocatoria por molestias en el gemelo izquierdo. Al igual que su homólogo navarro, San Juan empezaba la tarde con complicaciones.

Enfrente esperaba un rival que siempre se ha sentido cómodo en el parquet sanjuanista. El conjunto de José Ibarra pecó de falta de intensidad y de concentración. Se adelantaron en la primera parte con una magnífica jugada personal de Txema González, a quien se le ha hecho corto el final de liga. A partir de ahí, los verdes se abonaron al pinganillo y se olvidaron de jugar a fútbol sala. Ander Eseverri trajo una tranquilidad efímera, puesto que un error defensivo provocó el 2-­1 y los nervios volvieron a impregnar a los navarros. Otra vez Txema apareció para marcar el 3­-1 y para hacer las delicias de la grada con una ‘lambretta’ de videojuego. Los maños consiguieron maquillar el resultado, pero los tres puntos ya no se moverían de Pamplona.

La Copa Navarra, en el horizonte

Tras el desenlace feliz para irurtzundarras y pamploneses, ahora es momento de afrontar sus compromisos locales. A falta de saber si Aspil Vidal Ribera de Navarra y Magna Gurpea Xota podrán jugar las semifinales en la presente temporada, Xota B y San Juan pelearán por completar ese cuadro frente a dos rivales de Tercera; el Kirol Sport e Ibararte, respectivamente.

En caso de acuerdo entre clubes clasificados, las semifinales y la final se disputarán en el próximo mes de agosto en período de pretemporada. El fútbol sala no para en Navarra, ¡que ruede el balón!

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