Partido vistoso con un pabellón casi lleno el que presenciamos la tarde del miércoles en la Agrupación. Los nuestros quedaron apeados de la Copa del Rey y lo hicieron ofreciendo dos caras muy distintas. Una primera parte rayando casi la perfección y una segunda con más corazón que cabeza.

Los dos equipos salieron con la intención de mandar en el partido y presionando bien arriba. Ibarra en los primeros minutos estuvo mejor asentado, más sereno y eso propició la primera del partido. Un tiro del navarro Javi Saldise que Amézqueta desbarató con una gran intervención. Pasando los minutos San Juan cogía ritmo, elaboraba jugadas y las tenían claras para adelantarse, como disparos a la madera. Los morados eran sobrepasados y tenían que parar a los verdes con cuatro faltas cortando contras claras con sus correspondientes tarjetas.

Cuando parecía llegar el gol local, una jugada aislada ocasionó un paradón de Amézqueta y seguidamnte un despiste defensivo tras el córner acabó con el balón al capitán vasco y gol. 0-1 en el minuto 13. San Juan lejos de venirse abajo, una jugada individual de Guille provocó el empate un minuto después y a partir de ahí se vivió un partido vibrante. Era un toma y daca con más llegadas por parte local. Ibarra llegaba a las cinco faltas pero no se arrugaban, tanto que después de un robo perdonaban el 1-2. Volviendo a la otra portería hubo dos llegadas muy claras de San Juan y fue a la tercera cuando llegó gol de Txema. Colocaba el balón en la escuadra tras un doble penalti en el minuto 17.

Los piparreros lo acusaron y San Juan tuvo otras dos llegadas claras pero no definían bien. Cuando el partido parecía llegar al descanso y en un nuevo córner se produjeron rebotes que dejaron el balón suelto. Éste le cayó a Oihan y no perdonó para hacer el 2-2 al descanso. San Juan propuso y tuvo más que Ibarra para irse por delante en el marcador, pero así es el fútbol sala.

La segunda parte de nuevo Ibarra comenzó mejor. Los de Iker Bizkai parecían acusar ese gol encajado al borde del descanso, pero eso en cuanto a juego porque en oportunidades éstas seguían llegando. Julen primero e Igor después erraban desde el mismo borde del área. Otra vez sería un espejismo ya que en el minuto 23 un balón largo acabó en un mal despeje y Oihan a la segunda en una perfecta picada marcaría el 2-3.

Duro golpe para San Juan pero los verdes se levantaban. Dispusieron así de dos claras ocasiones. Una a disparo de Tore y otra en una mano prodigiosa del meta piparrero. Por contra los vascos se dedicaban a jugar en largo, algo tan sencillo que bien se les da.

Los de casa con más prisa que precisión y algo descolocados. Una jugada que no generaba peligro y que fue mal defendida, acabó con la asistencia al segundo palo e Ibarra lograba el cuarto gol. Ahí ya los de Alfredo se gustaban, Pulido salvaba en la linea de gol el quinto de los visitantes… Este aviso despertó a San Juan y de nuevo manos a la obra. Transiciones que acababan en el poste, estrategias que no entraban por poco, individualidades, pero no había manera. Así que San Juan optó por el portero jugador.

Los cinco se asociaban bien, con profundidad y acabando jugadas pero estaba claro que no iba ser el día. Aún más cuando a falta de 40 segundos una doble tarjeta a Andoni acabó con una falta a seis metros. «De haber elegido bien hubiera habido emoción hasta el final», indicaba Iker Bizkai a la conclusión del partido. «Dar la enhorabuena a Ibarra por la clasificación y animar a los nuestros ya que jugaron un gran partido en lineas generales. Estando así las victorias no tardarán en llegar», añadía el técnico.

Foto: Ibarra (twitter)